El tradicional "pompero" nos puede ayudar en la clase de música a la hora de trabajar un concepto muy importante: los sonidos largos y cortos.
He utilizado este recurso con Educación Infantil y ha resultado muy satisfactorio. El niño o la niña debía soplar durante más o menos tiempo, haciendo soplidos largos y cortos. El resultado es muy visual, pues cuanto más tiempo soples más grande es la pompa obtenida. Si el soplido es corto, la pompa obtenida será pequeña.También nos puede ocurrir que salgan varias pompas cuando realizamos un soplido largo y una pompa solamente con un soplido corto.
De esta manera, al final de la actividad el alumnado diferenciaba entre sonidos largos y cortos. En ese momento, podemos escoger un instrumento como las campanas o el triángulo para que ejecuten sonidos largos y cortos. En mi caso, también utilizo la app para el iPad Bebot que nos permite hacer sonidos según toquemos la pantalla de nuestro dispositivo. Muy fácil e intuitiva para el alumnado.
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